MODERNA BUENOS AIRES

un programa

Arquitecto, urbanista y planificador, fue uno de los impulsores de las ideas modernas en tales disciplinas. Se recibe de arquitecto en 1921 y realiza, junto a Prebisch, un viaje de estudios a Europa, donde se nutren de las ideas de vanguardia. Juntos proyectan La Ciudad Azucarera, que es premiada en el Salón Nacional de Bellas Artes en 1924, y publicada en la Revista de Arquitectura de la Sociedad Central de Arquitectos junto con el “Ensayo de Estética Contemporánea”, primer manifiesto de la arquitectura moderna local. Escriben también una serie de artículos en la Revista Martín Fierro, donde desarrollan los fundamentos de la nueva arquitectura: “Hacia un nuevo estilo” (1925), “Arte decorativo, arte falso” (1925), “Como decíamos ayer” (1926), “¿Arte decorativo?” (1926). En 1926, ganan el segundo premio del Concurso del Barrio Municipal Los Andes (Primer premio a F. Bereterbide).

En la década de 1930, desarrolla una intensa actividad ligada al urbanismo. En la S.C.A., dicta cursos de urbanismo, colabora con el Comité Editorial de la revista, y ayuda a crear y participa de la Comisión Especial de Urbanismo y Estética Edilicia. Asimismo, propone proyectos para la Avenida de Mayo y para la Avenida 9 de Julio. Escribe con Bereterbide un libro sobre la problemática urbana “¿Qué es el urbanismo?” editado por el Concejo Deliberante (c.1935). Entre 1936 y 1943 se desempeña como arquitecto de la Dirección Nacional de Vialidad, dependencia del Ministerio de Obras Públicas, colaborando en el proyecto de la Avenida General Paz.

A mediados de la década de 1940 participa con Caminos, Sacriste, Zalba y Beretervide, del plan de reconstrucción de San Juan que había sufrido un fuerte terremoto. En 1944 se desempeña como arquitecto en el departamento técnico de reconstrucción sanjuanino, en 1944-45 en el Consejo Nacional de la Vivienda, en 1946-47 en la Dirección Nacional de Arquitectura. Tiene un rol destacado en la creación del CPAU (Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo), creado por ley nacional en 1944. Además, se desempeña, entre 1948 y 1951, como profesor en el curso superior de Urbanismo en la Facultad de Arquitectura de la U.B.A.

En 1953, es contratado por los Programas de Cooperación Técnica del Consejo Interamericano Económico y Social financiados por la O.E.A. Analiza como asesor el tema de la vivienda rural en distintos países latinoamericanos y, como profesor con sede en Bogotá, está a cargo de cursos de extensión en Venezuela, Colombia, Brasil y Puerto Rico. En esa época, escribe numerosos informes: “La vivienda tropical húmeda. Sus aspectos sociales y físicos”, “La vereda de Chambimbal”, “Manual de investigación y extensión en vivienda rural”, todos ellos de 1958.

Luego de su retorno a Argentina en 1963, continuó ligado a temas de planificación y urbanismo y escribió sobre “vivienda y clima”, “vivienda rural” y “metodologías de intervención habitacional”. En 1980, se desempeña como asesor en el Centro de Servicios Rurales de la Provincia del Chaco. En 1981, funda la Asociación Argentina de Vivienda Rural.

De su obra privada, en general asociado con otros arquitectos, podemos mencionar: Crámer 2067 (1928), con el arq. Alberto Prebisch; Estudios para casas económicas (1933); Anteproyecto del Instituto Científico Experimental de la Lepra, Rosario (1935), con los arquitectos Luis Olezza y Fermín Bereterbide; Edificio de departamentos de República Arabe Siria (ex Malabia) 2885 (1935) con el arq. Jorge Bunge; Sanatorio Anchorena (1941) con el arq. Luis Olezza; Conjunto de viviendas “Palacio de los gansos” en Ugarteche y Las Heras (1942), con el arq. Luis Olezza.