MODERNA BUENOS AIRES

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Celebramos el centenario del nacimiento de Clorindo Testa y agradecemos su enorme legado en el campo de la arquitectura y el arte.
 

Clorindo Manuel José Testa nació en Nápoles el 10 de diciembre de 1923, pero llegó a Buenos Aires cuando aún no había cumplido un año. Terminó la escuela secundaria a los 15 años y cuando tenía que definir su futuro profesional, eligió estudiar ingeniería electromecánica, primero, e ingeniería civil, después, porque su sueño era diseñar barcos. Cursando esta última fue que descubrió la arquitectura.

Testa se graduó en1948 en la Universidad de Buenos Aires y a los pocos meses ingresó en el Plan Regulador como dibujante. Allí trabajó un año, porque ganó una beca de la facultad y viajó a Italia por tres años. Al regreso, comenzó a participar en concursos de arquitectura. El equipo formado por su compañero de carrera Francisco Rossi, Augusto Gaido, Boris Dabinovic y Testa ganó, en 1951, el de la Cámara Argentina de la Construcción. Con ese equipo, continuó trabajando hasta 1958 incluso en proyectos en otras provincias, como La Pampa y Misiones.

En 1959 se unió al estudio SEPRA, ganó el Concurso para la casa matriz del Banco de Londres y América del Sur, obra paradigmática de la arquitectura argentina. Tres años después, volvió a deslumbrarnos con el proyecto de la Biblioteca Nacional, que fue resultado de un concurso que ganó con Francisco Bullrich y Alicia Cazzaniga. En 1969 se asoció con Héctor Lacarra y Juan Genoud, con quienes proyectó durante la siguiente década, destacándose el Hospital Naval. En 1979 junto a Jacques Bedel y Luis Benedit ganó el concurso para el Centro Cultural Recoleta. Y más adelante se destacan el balneario la Perla en Mar del Plata, varias casas de veraneo o residencia en Pinamar, Mar del Plata y Mar de Ajó y el Instituto de Cooperación Iberoamericana en Buenos Aires. En 2003, con Juan Fontana y Oscar Lorenti, ganó el concurso para la nueva Ciudad Cultural Konex, y en 2010 proyectó el Museo del Libro y de la Lengua, contiguo a la Biblioteca Nacional. Estas obras son algunos de los hitos de su extensa producción arquitectónica.

Otra producción igual de enorme se puede mencionar en el campo del arte, además de los premios y reconocimientos que cosechó a la largo de su vida: el Konex de Platino en 1982 y 1992, el nombramiento como Doctor Honoris Causa de la UBA, entre ellos.

Clorindo murió el 11 de abril de 2013. Además de su legado, dejó imborrables recuerdos, como la necesidad casi compulsiva de dibujar mientras hablaba de sus proyectos y los anteojos por encima de las cejas, sobre la frente. Esas son sus marcas registradas que llegan hoy en forma de nostalgia.